Hoy en día, el mayor productor mundial de vino italiano ha sufrido durante mucho tiempo la reputación de ser barato pero de mala calidad. Sin regulación, muchos vinicultores recurrieron a prácticas a veces dudosas, pero la década de 1960 y la creación de la Denominación de Origen Controlada (el equivalente a nuestras Denominaciones de Origen Protegidas) permitieron regular la producción y renovarla para mejor.

Los vinos italianos se clasifican en cuatro categorías, desde los más simples hasta los más restrictivos. 

#Vino da tavola (o vino de mesa): son vinos sin denominación de origen.

#Indicazione geografica tipica (IGT): estos son los vinos locales

#Denominación de origen controlada (DOC): es el equivalente a nuestras Appellations d'origine contrôlée (AOC), esta denominación garantiza el origen de las uvas y el cumplimiento de un método de producción específico.

#Denominazione di origine controllata e garantia (DOCG): este es el mismo principio que el DOC pero cumple con estándares aún más estrictos.

ATENCIÓN: Estas categorías resaltan el cumplimiento de ciertos estándares y no son necesariamente sinónimo de calidad, ya que los Super Toscanos, que se encuentran entre los mejores vinos de Italia, son IGT.

Cifras del vino italiano

La herencia del vino italiano se remonta a unos 4000 años.

Las DOC y DOCG representan menos del 20% de la producción de vino del país

Campeón en todas las categorías en este ámbito, Italia cuenta ahora con 338 variedades de uva diferentes (frente a las 210 de Francia)

Los tres vinos estrella del otro lado de los Alpes

¿Conoces los equivalentes italianos de nuestro Château Margaux o Château Latour? 

El Barolo es un vino de la región del Piamonte, cuya capital es Turín. Elaborado normalmente con una sola variedad de uva, la Nebbiolo, goza de renombre desde la Edad Media, y se dice que Luis XIV lo bebía habitualmente en su mesa.

Barbaresco también es del Piamonte, pero esto no es sorprendente ya que la región tiene la mayor densidad de denominaciones de origen en Italia, ¡con nada menos que siete DOCG y cuarenta y tres DOC!

Con Brunello di Montalcino viajamos a la Toscana para cambiar de aires y de época, como la conocemos desde 1870. Para un país que produce vino desde hace casi 3.500 años, ¡casi parece un joven!

El vino italiano representa actualmente más del 20% de la producción mundial de vino. Gracias a su capacidad para adaptar y mejorar las técnicas de vinificación, algunas de sus cosechas son reconocidas por los expertos como las mejores del mundo. Los italianos también pueden contar con la popularidad del Prosecco, y más concretamente del cóctel Spritz, ¡que ahora se disfruta en todo el mundo!

La selección de Jean-Michel

Si desea aprender más, pero sobre todo catar estos vinos italianos, Jean-Michel Deluc le ofrece esta joya del Piamonte italiano, un Dogliani DOGC que le apasiona. En sus propias palabras, lo describe como: « una pequeña maravilla de frutosidad y carácter».

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No pudimos resistirnos a presentarles este pequeño Prosecco, La Vigna di Sarah. Lo servimos con todo tipo de salsas, ¡y les aseguramos que es perfecto solo o con Aperol para los amantes del Spritz!

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