Los mandamientos para una buena hamburguesa
Al preparar una hamburguesa, todo es importante. No se debe pasar por alto nada.
Buenos bollos
Los panecillos son el pan que se usa para las hamburguesas. Deben ser frescos, ligeramente brioche y tostados por dentro. Los hay de varios sabores: sésamo (el más clásico), aceitunas, queso, etc.
Carne cocinada a la perfección
Cocinar la carne depende del gusto del cliente. Cocinar un lado de 1 a 5 minutos ofrece diferentes opciones de cocción: azul, poco hecho, rosado, al punto y muy hecho. Siempre selle bien la carne al principio para que tenga un aspecto ligeramente asado. Luego, reduzca el fuego si desea continuar cocinándola.
Una salsa digna de ese nombre
Una hamburguesa sin salsa es como una cata sin copa. Simplemente no funciona. La salsa debería ir primero en la base del pan y luego en la parte superior del lateral.
Una guarnición fresca
Los ingredientes son tan importantes como la carne. Son lo que le da el toque y la originalidad a la hamburguesa. Queso, verduras, ensalada verde, hierbas frescas, cebolla. No dudes en variar y cambiar los sabores (ver pág. 12).
Un hermoso acompañamiento
La combinación de papas fritas y ensalada sigue siendo la mejor... Papas fritas para el capricho. Ensalada para la conciencia tranquila. Luego está la ensalada de col, una ensalada que combina repollo crudo y zanahoria, pero también puedes pensar en papas fritas, chips de verduras...