Hervé Bizeul es uno de los enólogos más artísticos. Entusiastas de todo el mundo hablan de él, lo prueban y coinciden: ¡este vino es un clásico de culto!

La historia comienza en 1997, cuando Hervé Bizeul dejó su vida parisina por una parcela de garnacha vieja en el valle de Agly, cerca de Perpiñán, donde el rugido del nacimiento de los Pirineos creó una multitud de terruños propicios para la vid.

Convencido de que « nada puede reemplazar la mano humana », Hervé elabora vino con sus entrañas, con sus manos y también con su corazón. El mismo corazón que late a medida que avanza la temporada y maduran las bayas. Elabora vino con su valentía, sus dudas, su instinto, su tenacidad, pero sobre todo con su generosidad, y lo menos que podemos decir es que la naturaleza le devuelve el favor.

Su éxito aún lo sorprende, y eso es bueno, porque es esta humildad la que le permite crear vinos con cuerpo, sinceros, deliciosos y con carácter, vinos que tienen " la cara del lugar donde nacieron ". Hervé es simplemente apasionado y fascinante, y sus vinos lo son también.

En Petit Ballon nos apasiona la gente innovadora, por lo que queríamos presentarles una oferta excepcional con no solo un vino de este admirable enólogo, ¡no dos, sino cuatro! Una gama completa que muestra el alcance del talento y la complejidad de este terroir. ¡Permítannos presentarles estas tres joyas! {{widget type="ballon_blog/widget_productblock" product_sku_1="SOR16_VF_R3_OCT17" label_1="Je craque" target_1="_blank" product_sku_2="BTR16_VF_R3_OCT17" label_2="Mon coeur bat déjà pour elle" target_2="_blank" product_sku_3="FEE10_VF_R3_OCT17" label_3="Goûter à la magie" target_3="_blank"}}